Un videoblog para promocionar Bananity
Hablando con uno de mis socios en USA me dice: "obviamente ni se me pasa por la cabeza emprender nada en España..." - Marc Vidal, consultor de negocios y blogger financiero.Que el último proyecto comandado por Andreu Buenafuente en Antena 3 ha sido un fiasco tanto a nivel de audiencia como de crítica lo sabemos de sobra. Que el buen humor y los contenidos inteligentes parecen haber abandonado la televisión tradicional para instalarse en recovecos indie de la red es aún más evidente. Lo demuestra la ingente cantidad de webseries amateur de excelente calidad técnica y artística que han aparecido en los últimos años junto a formatos como Solocomedia, de Ángel Martín, el diario El Mundo Today o el show en streaming Visto lo visto, del que hablaré próximamente. A veces sólo es cuestión de unir los puntos y encontrar la respuesta...
La entrada de hoy en principio iba a ser una disertación sobre los problemas de la hermeneútica en la interpretación de textos cartesianos, tema que lo habría petado, pero resulta que el miércoles nos vimos sorprendidos por esas esas medidas del gobierno que tan bien han sentado a la gente y que me han hecho replantearme mi futuro y orientarlo hacia trapecista de circo ambulante o prostituto cojo, lo que sea menos absurdo. La cosa parece estar jodida, y ahora la gente más que nunca necesita hablar del tema. Y si aún por encima sacamos algo positivo, mejor.
Como se suele decir, las desgracias nunca vienen solas, y tras la escabechina financiera del otro día, hace pocas horas me enteraba de la noticia: Buenafuente regresa. Que Miedo. En internet. Bueno, bien. Con Pau Garcia-Milà. Interesante. La nueva apuesta del catalán, a medio camino entre Humor Amarillo y Verano Azul, no será más que un conjunto de diez vídeos grabados desde la webcam (de un mac, todo hay que decirlo) de la casa de verano de Andreu, donde él, con su amigo y socio Pau Garcia-Milá, hablará de forma espontánea e intencionadamente humorística sobre temas de actualidad.
Lo primero que he de hacer, supongo, será poneros en antecedentes, pues algunos no conoceréis a Pau Garcia-Milá. Sobre él diré que es el modelo al que todos deberíamos seguir si queremos salir "de esta" y demas topicazos. Autor de una frase que me encanta, "Si sólo el 3% de la sociedad son políticos, ellos no nos van a sacar de la crisis. El 97% restante, algo podremos hacer." Milá es un emprendedor y un innovador. España, como vimos el miércoles, es el lugar en el que nos educan para el fracaso. Si haces cosas, vas a estrellarte, el famoso "te lo dije". Y si triunfas es por suerte. Si quieres emprender, mejor cuando acabes los estudios, a los 23 años, ahora no. No ahora. Nunca. En resumen: verguenza y asco.
Intentando Pau llevar a cabo el desarrollo de una web de anuncios, acabó creando por casualidad una tecnología en la que se limitaban los caracteres que podía escribir cada usuario. Cuando una empresa le ofreció comprársela pensaron que fracasaría, y ahora esa idea es twitter. Chapparrón de humildad. Su compañía es la creadora de eyeos, un escritorio virtual multiplataforma que reproduce la estructura de un sistema operativo que fue el germen de la computación en nube, actualmente en alza con sistemas como icloud de Apple o Dropbox. Y lo digo yo que no entiendo mucho de estas cosas.
Por su recorrido personal, Buenafuente invitó dos veces a este valiente joven en su última temporada en La Sexta, a partir de ahí se hicieron amigos, y unos meses después socios, fundando juntos la red social Bananity. Y es que, como comenté en mi post sobre Buenas noches y Buenafuente, la filosofía de El Terrat se acerca mucho a la de Milá o a gigantes como Apple y Google. No os perdais la entrevista. El chaval habla e ilusiona como ninguno.
Por su recorrido personal, Buenafuente invitó dos veces a este valiente joven en su última temporada en La Sexta, a partir de ahí se hicieron amigos, y unos meses después socios, fundando juntos la red social Bananity. Y es que, como comenté en mi post sobre Buenas noches y Buenafuente, la filosofía de El Terrat se acerca mucho a la de Milá o a gigantes como Apple y Google. No os perdais la entrevista. El chaval habla e ilusiona como ninguno.
El caso es que este nuevo formato que parecen haberse sacado de la manga es un derivado de su red social. Y debo decir que se queda en una promoción muy evidente de esta. En el primer capítulo, dedicado a la Eurocopa, hemos visto como ambos personajes buscaban en Bananity las páginas relacionados con el tema a tratar, bien fueran La roja, Iker Casillas o Sara Carbonero, comentando los resultados. Evidentemente, este no es el regreso de Buenafuente, ni creo que se lo plantee como tal. Preguntarse si es mejor o peor que su anterior programa sería ridículo, no son comparables.
Lo que sí ha conseguido este videoblog es que me decidiese a adentrarme un poco más en este proyecto. No sólo es necesario para entender el vídeo, sino que además me llama bastante la atención. Lo hace porque es una idea de gente que intenta aportar algo que puede ser útil, con ganas de hacer cosas, la única forma de sacar adelante este bendito país, por mucho que le pese a los que gustan de incharnos el IVA y los cojones.
Se le podrá criticar lo que querais, pero que en tiempos como estos salgan cosas así es tan enriquecedor como meritorio, sobre todo con las dificultades que se ponen en España a la innovación. En otros países a las empresas que están empezando se les conceden los primeros años de exención de impuestos para ayudarles a arrancar. Eso aquí ni en un siglo.
Se le podrá criticar lo que querais, pero que en tiempos como estos salgan cosas así es tan enriquecedor como meritorio, sobre todo con las dificultades que se ponen en España a la innovación. En otros países a las empresas que están empezando se les conceden los primeros años de exención de impuestos para ayudarles a arrancar. Eso aquí ni en un siglo.
Bananity es una red social en la que te defines por lo que amas y por lo que odias. Como la vida misma. El usuario puede elegir que ciudades, restaurantes, famosos, libros, películas, tendencias o eventos le gustan y encontrar personas afines a ella. Si redes como facebook están destinadas al contacto con gente que ya conoces, este proyecto te da la oportunidad de encontrarte con personas con las que no tienes ningún vínculo personal pero sí un montón de cosas en común.
El amar a otra persona porque odiais lo mismo puede parecer en principio algo oscuro, pero lo sorprendente es que en las estadísticas a la gente le suele gustar sobre el 70% de las cosas, mientras que desprecia solo el 30%. Igual el ser humano no es tan malo como parece. Precisamente el atractivo del vídeoblog de hoy consistía en comprobar si a los usuarios les despertaba simpatía la Eurocopa o Sara Carbonero y por que. Además el propio documento, aunque accesible para todos en youtube, sale de la plataforma, donde la gente debe votar también si es o no de su agrado. Sumémosle el rostro conocido del presentador de Reus, y autopromo que te crió.Y bien que hacen.
Bananity es fruto del trabajo de solo seis personas, cuatro dedicadas a tiempo completo: Carles Iborra, ingeniero multimedia por La Salle, con 10 años de experiencia en programación. Es también un emprendedor, fundador de una empresa de programación con David González, que ha sido dos veces finalista de la Campus Party, en 2011 con Bananity. Maria Sanfeliu es MBA (Master in Business Administration), por ESADE, ha realizado labores de consultoría y trabajó durante un tiempo para TV3. Los dos fundadores son Sergio Galiano, ingeniero industrial, que fundó una empresa de I+D destinada a la captación de financiación para industrias de tecnología y Pau Garcia-Milá. Como maestro de ceremonias el propio Andreu Buenafuente.
Sana ambición. Quejarse de Rajoy está muy bien, pero no va a hacernos mucho caso. Contraataquemos. Nos hemos pasado mucho tiempo pensando que nosotros no tenemos ninguna capacidad de decisión sobre lo que va a ser nuestra vida, y realmente tenemos más que esos que se creen nuestros gobernantes. Cosas como Bananity no van a cambiar el mundo por arte de magia, pero ayudan y, además, a algunos nos ilusionan y nos hacen creer que existen alternativas.
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