Intentaré que esta no sea otra de esas soporíferas listas con lo mejor y lo peor. Los mejores vestidos, las mejores películas, los momentos más amazing, los peores BUM... pero lo único que puedo asegurar es que está llena de eventos que he tenido que investigar, porque si ya me cuesta recordar lo que cené hace dos días, pues a saber que es lo que daban en la tele en Marzo. Es cierto que no he tenido el placer de presenciar en directo muchos de los momentos destacados del mundo catódico español , pero aún así esa herramienta mágica de twitter me ha permitido seguir estos fenómenos de manera tan cómoda e inmersiva como lo haría el espectador más aguerrido. Es fascinante lo que un hashtag bien promocionado, un par de fotos y algún articulo de un blog anexo pueden lograr.
10. El semen multisabor de Amador Mohedano
9. La imbatible Mariló
Si bien fue el año pasado cuando llegó el highlight de sus loquísimas teorías vanguardistas sobre el transplante de alma que la hicieron conocida en todo el plantea, este 2013 no ha estado precisamente calladita. Para la posteridad quedarán su comentario sobre el crimen de Asunta Basterra, "si acababa de ser asesinada, estará blandita", o su reciente enfrentamiento con el alcalde de Borja. Yo me quedo con otro momento épico también muy cercano, el tenso encuentro de la presentadora de Las Mañanas de la 1 con el supuesto propietario de un boleto de lotería extraviado en A Coruña, al que acabó haciendo confesar varios delitos violentos. Su contrato ha sido renovado hasta Junio de 2014, pero ojalá este sea el inicio de una prolífica carrera y aún podamos disfrutar de muchos más años de Mariló. Porque -y esto es indiscutible- Mariló, no hay nadie como tú.
8. Lucía Etxebarría en Campamento de Verano
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Telecinco también nos sorprendió este verano con un reality bastante low-cost en el que varios rostros habituales de la cadena debían convivir entre ellos cual departamento de geriatría de los boy scouts. Seré sincero, no vi ni un segundo del espacio, pero seguí muy de cerca la historia de esa pseudo Lena Dunham de folletos de gasolinera generacionales que es Lucía Etxebarría. El contraste intelectual y de estilo de vida entre la Premio Planeta y el resto de sus compañeros fue algo fascinante de conocer, y más el circo de aves de rapiña que se montó a su alrededor cuando abandonó el concurso y protagonizó un sonado Salvame Deluxe en el que Terelu y compañía a punto estuvieron de despellejarla.
7. La Boda Roja de Juego de Tronos
Había mucha expectación entre los lectores de Canción de hielo y Fuego por saber si serían capaces de adaptar a la pequeña pantalla los cruentos sucesos conocidos como La Boda Roja, y que finalmente se materializaron en The Rains of Castamere, el episodio 29 de la prestigiosa serie de HBO. El impacto de la escena fue tal que en los días posteriores casi no quedaba bicho viviente que no supiese que en ese capítulo hay una boda que termina en escabechina, estropeando la sorpresa a todos los que todavía no hayan sido absorbidos por el profundo y adictivo universo que plantea esta saga literaria y televisiva de éxito sin precedentes.
6. Masterchef y Top Chef
Sin duda una de las revelaciones de la temporada ha sido Masterchef. Las claves del triunfo de este concurso culinario de TVE pasaban por crear un producto blanco y familiar rodeándose de unos concursantes bastante dóciles que se dejaban querer. Como resultado tenemos uno de los mejores formatos que ha recibido la televisión española en el último año, el cual gozó además de una gran repercusión en la redes sociales, con personalidades como el humorista Berto Romero comentando minuto a minuto lo que pasaba. En menor medida un desastre como Top Chef obtuvo también un notable seguimiento. Gran parte de este éxito es mérito Antena 3, que además de encargarse de que uno de los jueces fuese el coach culinario de moda, Alberto Chicote, contrató a tuiteros de gran influencia para asegurarse de que comentaran el programa. La buena suerte de ambos hará que el próximo año lleguen nuevos shows culinarios a nuestra parrilla.
5. El Relaxing Cup de Ana Botella
¡Que decir de este momento! Aparte de que ese concepto al que llamamos Marca España cada día está más deteriorado por sucesos como este que vivimos a diario. España siempre ha sido un país de sainete, gobernado por personajes ridículos y esperpénticos, donde el sentido del humor no nos escasea a la hora de tratar situaciones absurdas y descabelladas. No creo que Madrid contase con muchas posibilidades de convertirse en la sede olímpica de los juegos de 2020, pero el discurso de la alcaldesa Ana Botella se encargó de exterminar cualquier mínima opción.
4. Ozymandias y el final de Breaking Bad
El final de una de las series más exitosas de los últimos años era uno de los episodios más esperados del año, hasta el punto de que algunos fans ansiosos decidieron quedarse despiertos esa madrugada para verlo directamente en el streaming de AMC. Felina fue un desenlace redentor y complaciente con el público, aunque carente del riesgo que supondría llevar al personaje hasta su maldad extrema e irreversible. Que el hype estuviese por las nubes era lógico teniendo en cuenta que dos semanas antes los fans ya habian incendiado las redes sociales con el emocionante, circular, metafórico y brillante Ozymandias, que podría servir como una perfecta clausura del periplo iniciado por Walter White cinco años atrás. En su dirección se encontraba Ryan Johson, realizador de Looper.
3. El Salvados del Metro de Valencia
Destacar el enorme seguimiento en twitter de esta emisión en concreto sería de perogrullo, pues el éxito de todas y cada una de las entregas de Salvados en esta red social es un hecho al que estamos acostumbrados. Para todos los que anhelamos la utopía de una televisión con potencial transformador, utilitario y de formación de la ideología nos reconforta la enorme repercusión mediática de este incidente que fue olvidado hace años sin que nadie fuese juzgado por él. Revitalizante y esperanzador que gracias a las cuestiones planteadas en el espacio el juicio se abriese de nuevo semanas después. Jordi Évole y su equipo pueden sentirse orgullosos.
2. Josep Pedrerol vetado en Punto Pelota
Todo lo ocurrido con la ruina económica de esta reaccionaria e hiperbólica cadena de televisión digital en los últimos años es tan hilarante como a veces difícil de creer: pasando por las campañas para pedir donativos de los espectadores o el traslado de los estudios durante este verano con el plan de Julio Ariza de realizar un lavado de cara a la empresa que resurgiría como el ave fénix bajo el nombre de Inter TV. Pero quizá lo más significativo ocurrió hace poco más de un mes. El presentador del programa más exitoso de la cadena, Josep Pedrerol, se encontraba con el paso cortado una noche de noviembre cuando intentó como hacía a diario acceder al plató de Punto Pelota para hacer su trabajo, comprobando atónito como su equipo había sido sustituido sin previo aviso por otro capitaneado por Carlos García Hirschfeld.
El también colaborador de Jugones en La Sexta se recuperó del varapalo y anunció que pronto volveríamos a verlo en las noches. Tras barajarse 13tv como posible opción, unas semanas después se confirmaba que tendrá su propio espacio en las madrugadas de Nitro.
1. El Tiempo Entre Costuras
El fenómeno de María Dueñas que arrasó en librerías a finales de 2010 se convirtió en la serie que Antena 3 decidía guardar en el cajón durante más de dos años a la espera de un hueco en su programación (decisión por la que deben de estar tirándose de los pelos), y que ahora se ha convertido en un éxito inesperado reconciliando a muchos con algo que hasta ahora nunca habían tenido: confianza en la ficción española. El éxito de audiencias se ha visto complementado por una gran aceptación de público y crítica. El tiempo entre Costuras ha gustado, y es un ejemplo de que las cosas suelen funcionar cuando se hacen bien y que no hay excusa para no dar el callo.
Bonus Track: Entre Todos
Otro gran ejemplo del fenómeno del hate watching, de ese "voy a ver este programa horrendo para sacar mi carnet de policía de la moral y poder fruncir el ceño en señal de desaprobación". O solo para algunos, pues gran parte de la ciudadanía se emocionaba de verdad con esta bochornosa y nada ejemplarizante muestra de caridad, indigna de una televisión pública. El mejor momento de su corta historia fue esa llamada de un espectador que criticó abiertamente el programa afirmando que es el gobierno el que debe procurar un estado del Bienestar para sus ciudadanos en lugar de fomentar que nos sacrifiquemos los unos por los otros o reactivar campañas del estilo Ponga un pobre en su mesa. Aún así debo reconocer que las incómodas y surrealistas situaciones que crea Toñi Moreno con algunos de las personas a los que atiende telefónicamente son mi pequeño placer culpable.
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