Las series revelación del 2013

Este 2013 ha sido un año fantástico para la televisión. La proliferación de la ficción seriada como estructura narrativa clave del siglo XXI está a punto de convertirse en una realidad. Esa supuesta era dorada que no es tal se encuentra más viva que nunca y este año nos lo ha demostrado con fantásticas temporadas y episodios que nos han hecho vibrar una vez más con nuestras historias favoritas. Y aunque no debamos olvidar lo nuevo de algunas ya asentadas en la parrilla (Game of Thrones, Mad Men, Justified, Breaking Bad, Bob's Burguers, Girls...), hoy quiero centrarme en algunas sorprendentes novedades que han llegado para quedarse y a las que no estaría de más prestar atención. Huyendo de los rankings y las tan cuestionables clasificaciones,  he confeccionado una lista con estrenos situados al mismo nivel que, además de ser muy recomendables, cumplen dos condiciones: han aparecido este año y han sido renovadas para la próxima temporada. Hay de todo:  comedia, drama, terror, animación, ciencia ficción, superhéroes, policíacos, espías...  

Les Revenants 

Empezamos  con una trampa, pues fue a finales de 2012 cuando llegó a las pantallas de Canal+ Francia, aunque sin duda es este año en el que nos hemos rendido ante las bondades de la gran revelación de la televisión europea. Relato a caballo entre el drama intimista y el horror sobrenatural, un día el pueblo de Annecy se levanta con que algunos de sus seres queridos fallecidos hace años ahora han regresado a la vida sin saber que les ha ocurrido ni por qué están allí. Lo que al principio parece un milagro caído del cielo pronto desemboca en unos resucitados asociales que irán desarrollando actitudes zombíficas y gregarias. Gran desarrollo de personajes sin caer en profundidades impostadas y huecas.  Un conjunto de pequeños conflictos domésticos cohesionados gracias a un guión sin apenas fisuras, donde el post-rock de Mogwai se encarga de acentuar la atmósfera desasosegante de esta historia de por sí absorbente. 

Todo un fenómeno internacional, ya que mientras los británicos preparan un remake al cargo del que estará Paul Abbott (Shameless, State of Play), el 9 de Marzo se estrena en la ABC americana Resurrection, adaptación de una novela con una premisa muy similar que muchos esperan que sea la nueva Lost. 

Utopia

Deudora del mundo de la novela gráfica, en especial del cómic Los invisibles de Grant Morrison, y a la estela de otras series británicas de corte juvenil y fantástico como Misfits. Utopía es otra confirmación de que las distintas ramas de la cultura pop no son compartimentos estancos y de como el audiovisual tiene que mirar más allá de su propio ombligo si lo que busca es evolucionar alcanzando nuevos horizontes creativos. Confirmación también del grado de madurez y diversificación que ha alcanzado un medio como el televisivo hasta el punto de poder mostrar aquí una estética llena de personalidad, con un uso de los colores y una recreación escenográfica de gran potencia visual. Prepárate para descubrir la gran conspiración del año.          

Rectify 

Algunos expertos han encontrado en ella la más firme sucesora espiritual de Los Soprano, lo cual no sé si la pilla a ella un poco grande o a mí algo desprevenido. Desde luego no es la nueva Mad Men ni Breaking Bad (aunque iba a compartir cadena con ambas, y dos de sus productores lo son también de la segunda), pero su disección del personaje principal y lo cuidado de su puesta en escena asciende esta creación de Sundance Channel al olimpo de las grandes series. Daniel Holden es liberado de prisión tras 16 años una vez que la revisión de pruebas ha permitido comprobar que es posible que él no violase y matase a su novia. Rectify apenas se centra en descubrir si Daniel es o no el asesino, prefiere recrearse en esos momentos de contemplación intimista y tonal que ya han hecho otras apuestas como Rubicon o Treme. Serie que para algunos puede parecer lenta, pero que resulta más inmersiva y cautivadora conforme avanzan los seis capítulos de su primera temporada.   

The Americans 

Las alabanzas hacia esta serie de FX que nació como la hermana pequeña de Homeland se centran en el escogido uso de la música pop, la estupenda reconstrucción de la américa de Ronald Reagan y la indudable química de su pareja protagonista, sobre todo el divertido Matthew Rhys. Una pareja de espías soviéticos convive con sus dos hijos infiltrados en suelo americano. En apariencia son solo un aburrido matrimonio que regenta una agencia de viajes, pero cada noche cogen un ejemplar de su basta colección de pelucas molonas para continuar con la peligrosa misión de hundir al capitalismo desde sus entrañas. Por si fuera poco, su vecino de enfrente es un agente del FBI que les va pisando los talones sin conocer su identidad ¿Suena interesante, verdad? No en vano se ha convertido en mi drama favorito del 2013.     

House of Cards 

Solo hacia falta que un gigante como Netflix se uniese a un gran cineasta como David Fincher para que esto de la distribución online empezara a ser tomado en serio. Llamarla webserie es algo fuera de proporciones, y dejaría en bastante mal lugar al resto del formato. Adaptación de un drama británico del mismo nombre, estamos ante un gran serie con un enorme Kevin Spacey que retrata a la perfección las cloacas de la política americana y las esferas del poder. Una historia de venganza, enfrentamientos, traiciones y el ascenso del severo y frío Frank Underwood a la cima de un castillo de naipes a punto de derribarse. La dirección, fotografía, guión e interpretaciones rozan la perfección. Algunas secuencias te pondrán los pelos de punta.      

Orange is The New Black 

De Netflix a Netflix y tiro porque me toca. Jenji Kohan, creadora de la fantástica Weeds, nos lleva en esta comedia a conocer las historias individuales de las diferentes reclusas de una cárcel femenina en la que la refinada chica de bien Piper Chapman se verá obligada a pasar unos meses debido a que en el pasado transportó ilegalmente una maleta llena drogas. Allí se reencontrará con su antigua amante lesbiana, Alex Vause (enorme Laura Prepon), y conocerá a una variopinta galería de personajes que le harán cambiar su visión de la vida y su carácter. Colorista y narrada con optimismo, el uso de los flashbacks está implementado de forma efectiva para conocer los orígenes y motivaciones de los personajes. Los últimos capítulos de la temporada son una delicia.    

The Awesomes 

No solo de Netflix vive nuestra banda ancha. Las plataformas Amazon y Hulu tambien han intentado, con mayor o menor suerte, lanzarse a la producción propia. Una de sus apuestas fue esta curiosa deconstrucción animada de las historias de superhéroes que ha pasado en general bastante desapercibida. El reparto está encabezado por Seth Meyers (el sustituto de Jimmy Fallon en el Late Night de la NBC a partir de Enero), que produce la serie junto al creador de Saturday Night Live Lorne Michaels. Incorrección política y situaciones imposibles que solo la animación puede conseguir. El resultado son unas cuantas carcajadas aseguradas en un cóctel explosivo que recuerda a los cortos de TV Funhouse, a las genuinas píldoras de Adult Swim y a South Park.    

Marvel's Agents of S.H.I.E.L.D.

Tendré que ser yo el único loco que defienda el spin-off de Los Vengadores que tan poco está gustando a la gente. Conozco sus defectos: un reparto poco atractivo y carismático a excepción del Agente Coulson, (otra ridícula imposición de la cadena) e historias improvisadas que no parecen avanzar hacia un punto definido y planificado de antemano. Los incondicionales de la escuela J.J. Abrams que esperan acción y emoción a raudales quizá no se sientan cómodos con una serie que a pesar de tener a Joss Whedon desvinculado de ella desde el piloto mantiene algunas de sus constantes ideológicas. Se trata de una serie más centrada en el fondo que en el argumento, en lo que no se dice que en lo explícito, y que cuenta con sus mayores ventajas en las ramificaciones y conexiones que establece con el inmenso universo de la factoría Marvel.  

Hannibal

No comulgo nada con esta tendencia consistente en coger un icono popular literario o cinematográfico y transmutarlo en algo diferente para crear un éxito de masas atraídas por el hype. A veces salen cosas magistrales como el Sherlock de Steven Moffat, otras bastante interesantes como el Jinete sin Cabeza de Sleepy Hollow o el Norman Bates de Bates Motel y otras del todo a evitar como el Dracula de la NBC. El nuevo Hannibal Lecter estaría en el primer grupo, pues se trata de un drama tan claustrofóbico como multidimensional. No en vano es obra de uno de los mejores creadores de la televisión reciente, Bryan Fuller (el genio detrás de Dead Like Me y Pushing Daisies), que vuelve a demostrar en esta serie inspirada en El dragón rojo de Thomas Harris que la de Will Graham y el Dr. Lecter es una de esas historias que nunca pasará de moda.

Masters of Sex

Decir que junto con Orange... es la serie que más me ha cautivado de este 2013 es decir bien poco. Casi nada. En los años 60 un doctor especializado en obstetricia y una cantante de clubes nocturnos reconvertida a secretaria revolucionaron la manera en la que entendemos la sexualidad humana. La nueva serie de Showtime se traslada a la década anterior para contarnos como comenzó este estudio y las dificultades que tuvieron para llevarlo a cabo en la rígida e inmobilista sociedad de los 50. No veis la que se arma cuando alguien osa afirmar que las mujeres pueden darse placer a sí mismas sin la ayuda de un hombre.

Sobre ella orbita constantemente la sensación de ser una Mad Men de segunda fila, y al igual que esta cuenta con un gran componente metafórico sobre el papel social de la mujer en esa época y su despertar hacia un lugar más activo, valiéndose para ello de un plantel de secundarias tan dispares como complementarias. Una serie en la que abundan los desnudos pero que usa el sexo para hablar del amor, de la incomunicación en la pareja y los sentimientos y anhelos que nunca revelamos a los demás. El personaje de Lizzy Caplan es tal portento y maravilla que sería incapaz de decir nada sobre él. Tenéis que verlo.

Brooklyn Nine-Nine

Una comedia de corte paródico muy en la línea de Parks and Recreation que trae del Saturday Night Live al descacharrante Andy Samberg y juega sus mayores risas en la oposición de su personaje al de Andre Braugher.  La acción se sitúa en la estación de policía del Distrito 99 de Nueva York, y nos presenta algunos casos rutinarios y situaciones cotidianas pasadas por el prisma de unos diálogos ágiles y efectivos y un reparto tan loco como entrañable. A destacar la excéntrica secretaria interpretada por Chelsea Peretti, otra de esas fea-guapas tan irresistibles. Podemos decir que consigue llenar el hueco espiritual dejado hace unos meses por The Office US y 30 Rock, y al igual que estas en sus primeros episodios presentan un enorme potencial que puede convertirse en algo fabuloso.    

El tiempo entre Costuras 

La única española de la lista, y ni la voy a despreciar directamente por su nacionalidad  ni a decir que su mayor logro es que no parece española. Primero porque sí que lo parece, y segundo porque eso no es un logro. Algunos me mataréis por colocarla en una lista que la equipara con Masters of Sex y House of Cards, pero en mi opinión está hecha con bastante gusto. No hay ningún punto que destaque de manera magistral, vale. Pero el diseño de producción está trabajado, las interpretaciones son de altura y la historia entretenida. Las aventuras de la costurera reconvertida a espía internacional Sira Quiroga han reventado los audímetros de una manera inaudita en estos tiempos de segmentación de pantallas. Obviamente la ficción española aún tiene que madurar mucho para alcanzar el nivel europeo, pero la enorme repercusión de esta apuesta, junto a otras como Isabel o la malograda Imperium, son señal de que existe  esperanza y las cosas están empezando a hacerse mejor en este país. Esperemos que Galerías Velvet, el Alatriste de Enrique Urbizu o El Ministerio del Tiempo sigan la senda ensanchada por esta adaptación del bestseller de María Dueñas.   

Broadchurch 

Cuando piensas que esta es la El Tiempo entre Costuras inglesa se te cae el alma al suelo. Y eso que Broadchurch no es nada del otro mundo, pero tiene oficio y ritmo. Un policiaco bastante clásico que cuenta el asesinato de un niño en una villa costera y como este afecta a las relaciones de los distintos habitantes y la intromisión de unos periodistas por culpa del fucking twitter. Al final lo realmente atractivo reside en el detective interpretado por el enorme David Tennant (¿acaso no ocurre lo mismo en sus temporadas de Doctor Who?) y en la belleza de los emplazamientos más que en un caso cuya resolución no me convence demasiado.    

Dates

La serie que menos ganas tenía de ver del mundo mundial y una de las que más me ha gustado en mucho tiempo. Quizá porque yo, con mi natural tendencia al dramón y los lloriqueos, padezco también de esa idiotez y analfabetismo emocional que me impide desarrollar una relación personal de manera sana y educada. Dates es un drama creado por Brian Elsey (Skins) de los de casi llorar, pero narrado en episodios de 20 minutos, con varios insertos cómicos y una tajante sencillez de recursos. Tanto que podría haber sido perfectamente una webserie low-cost, aunque es de Channel 4. Cada entrega cuenta una primera cita entre dos desconocidos que han quedado a través de una web tipo meetic o edarling, y sirve como catalizador de las emociones tan pochas y anti-románticas que desprenden unos personajes que más que afecto buscan algo de consuelo en un mundo en el que parecen condenados a estar solos. Una primera temporada de  9 capítulos que puedes ver entera en una tarde como si fuese una película.


Fuera de esta lista se quedan apuestas como la miniserie Top of The Lake y otras interesantes como Peaky Blinders, Bates Motel o Legit porque si no esto se haría interminable ¿Y para vosotros, cuales han sido las mejores series de este año? Podéis dejar vuestras aportaciones en los comentarios a la vez que nuestros mejores deseos para el 2014 se centran en que sea un año lleno de tantas grandes series como este que despedimos.