Corría el año 2006 cuando Ángel Martín -tras una breve pero talentosa trayectoria haciendo monólogos en Paramount Comedy- comenzaba sin demasiadas expectativas su papel de colaborador en un discreto formato de vocación innovadora en una cadena que acababa de nacer bajo el amparo de Emilio Aragón y su imperio Globomedia. Sé lo que hicisteis era el nombre de aquel experimento que pronto marcó un pequeño hito en la historia reciente de la televisión española convirtiéndose en un golpe de efecto para el modelo imperante de realizar contenidos en la tele de aquellos días que ahora parecen tan lejanos. La hora de la siesta se convirtió en el momento ideal para escuchar a este mordaz personaje ejercer una sátira brutal contra los baluartes de la mal llamada prensa del corazón, logrando que muchos se diesen cuenta de que aquella industria que se iba de elitista no era más que una payasada. Como todo lo bueno, su chispa se apagó demasiado pronto pese al empeño de unos directivos cavernícolas y oxidados de mantenerlo a flote con gotero y desfibrilador. Finalmente supimos que la de Milikito había dejado de ser una televisión diferente donde ver cosas que pasen la raya, algo para lo que ahora es imprescindible contar con una conexión de banda ancha o una suscripción al Digital+.
Durante los tres meses previos a la cancelación del magazine, tres miembros de su equipo lo abandonaron uno detrás de otro por desavenencias con el rumbo que estaban tomando sus contenidos en la última temporada. Fueron el propio Martín; Alberto Casado, uno de los paparazi salidos del máster de guión de Globomedia; y Rober Bodegas, brillante guionista y monologuista (infravalorado por sus desafortunadas y poco empáticas apariciones en plató) que fue durante varios años uno de los guionistas principales. Ángel tardó poco en pasar página y pronto estrenó Nunca es tarde, una obra de teatro junto a su amigo (también ex de Paramount y de Sé lo que hicisteis) Ricardo Castella en la que ambos intercalan canciones que ya formaban parte de su repertorio como dúo en bares y teatros y cuyo trasfondo no es más que una crítica mordaz a los límites mercantilistas que pone el estúpido negocio de la tele y un llamamiento a que no nos demos por vencidos y todos lleguemos hasta el final cumpliendo nuestros sueños. Además, incluye ciertas referencias al mundo de las series de televisión contemporáneas (varios guiños a Lost) y el mercado de venta de biblias y pilotos.
Viendo que esto no era suficiente, a finales de 2011 el ex analista de medios decidió rescatar su canal de Vimeo Solocomedia y lanzar varias promos en las que incluía a Casado y Bodegas. El experimento pronto se reveló como una página web donde empezarían a subir vídeos cómicos de escasa duración y aún menos presupuesto escritos e interpretados por ellos mismos que en una primera impresión parecían más un juego o una ida de olla que un proyecto sólido y viable, aunque solo hicieron falta varios meses de recorrido para que la cosa fuese tomando forma. Al principio me molestó la estúpida decisión de contar justo con dos de los que, a priori, eran los peores miembros del programa. Podría haber cogido a Castella, a Patricia Conde o a Dani Mateo (que ahora está haciendo el tonto con Wyoming y en Los 40 principales) pero Ángel no es idiota ni tiene interés en rodearse de gente con la que no tiene simbiosis artística. Rober y Alberto, además de ser unos creativos muy cualificados, encajan muy bien en esa comedia perturbadora y algo corrosiva que quería llevar a cabo. Resulta que en La Sexta había muchos sketches que sus jefes no les dejaban ejecutar porque eran demasiado extraños o creían que la señora de Cuenca no los iba a entender. Así que un día se dijeron ¿por qué no los hacemos en internet? Casado y Bodegas tenían talento, solo que no lo habían mostrado hasta ahora. La idea surge del mismo referente que la incipiente Papanatos de Antonio Castelo (la cual también merece que le dediquemos un espacio): un portal estadounidense creado por los cómicos Will Ferrell, Judd Apatow y Adam Mckay llamado Funny or Die. En este espacio los tres actores no solo subían sus cortos, sino que contaban con un sistema mediante el que los usuarios pueden votar y jerarquizar los vídeos, además de presentar su propio contenido amateur. Por cierto, que más adelante la HBO les ofreció la oportunidad de convertir el espacio un formato de sketches convencional, Funny or Die Presents ¿Le ocurrirá lo mismo a su gemelo español? Ahora mismo Canal+ o la casi extinta Paramount Comedy son las únicas cadenas cuyo perfil podría incorporar estos contenidos sin ningún tipo de censura o remodelación.
El sistema es muy simple. Se les ocurre un chiste, lo escriben en forma de guión y lo graban. El resultado es un hilarante vídeo de entre uno y cuatro minutos en el que aparece alguno de los tres artífices y que cuelgan con una periodicidad diaria. Las situaciones son de lo más variadas: desde una pareja que pide cambiar de sitio en un restaurante porque él quiere que su chica se la coma fuertote debajo de la mesa, una discusión entre una prostituta y su cliente porque este se dispone a pagar con monedas sueltas, un matrimonio que no está contento con el horrible dibujo de uno de los niños que han apadrinado y pide a una ONG que orienten su carrera hacia otra disciplina artística o un rey mago Gaspar que decide suicidarse tras enterarse de que Melchor tiene cáncer y nunca podrán volver a repartir regalos juntos. No estamos precisamente ante unos actores de método, pero son sus limitaciones las que ayudan a crear personajes claros y repetitivos dotándolos de una vis cómica con la que seguramente soltarás grandes carcajadas ante sus gestos y su tono de voz. Tienen gracia los jodidos. Algunas ideas han dado lugar a pequeñas sagas, entre las que destacan tres falsos videoblogs de autoayuda que parodian este fenómeno tan prolífico (y a veces cargante): el de salud con Ángel, el de protocolo de Rober y el de fitness de Alberto.
No tiene más. No puedo dejar de recomendaros que en cualquier rato muerto entréis en solocomedia.com y disfrutéis de este entretenimiento momentáneo aunque nada vacuo. Al igual que en el caso de Ferrell, podréis encontrar cameos de famosos como Luis Zahera, Marta Torné, Daniel Albaladejo, María Valverde, Juanma Iturriaga, Susana Guasch o Berto Romero. También cuentan con la participación regular de los dos compinches de Alberto en Sé lo que hicisteis, los otros dos paparazi José Lozano y Mario Díaz, además de alguna que otra sorpresa con Castella. Resulta paradójico que mientras en la televisión suelen haber equipos de más de cien personas para dar a luz proyectos de escasa calidad que acaban siendo desechados a las tres semanas de emisión, aquí solo son necesarias cinco personas (ellos tres junto a un cámara/editor y una productora) para sacar un producto fresco, dotado de personalidad diferencial, de buen gusto, barato y capaz de simpatizar con un grupo de público bastante amplio. Y no son solo las ideas, ya que si atiendes a la fotografía y a la limpieza de la imagen en sí verás que está mucho más cuidada de lo que pedimos a un vídeo de coña para internet. Solocomedia va destinado a un target juvenil que jamás ha podido encontrar aquí una propuesta similar en medio de la insigne casposería patria, pero que aún así son consumidores de este tipo de humor debido a que gracias a la red pueden acceder a programas como Saturday Night Live o Portlandia y series como 30 Rock, The It Crowd, The Office o Louie.
Sin más, os dejo con una selección de lo mejor del portal. Os aseguro que os invitará a ver los demás.
Sublime en todos los sentidos ¿Qué como pollas en el bosque?
También han cultivado una serie de gags musicales (heredados en parte de la función teatral con Castella) al más puro estilo de Flight of The Conchords o Los Martínez.
Por más que escriba día tras día sigo sin saber muchas cosas sobre este mundo (y parece que cada vez sé menos), pero si algo tengo claro es que el futuro está en internet ¿O es el presente?
Archivo fotográfico ⎪ solocomedia.com, jotdown.es, YouTube.com
El sistema es muy simple. Se les ocurre un chiste, lo escriben en forma de guión y lo graban. El resultado es un hilarante vídeo de entre uno y cuatro minutos en el que aparece alguno de los tres artífices y que cuelgan con una periodicidad diaria. Las situaciones son de lo más variadas: desde una pareja que pide cambiar de sitio en un restaurante porque él quiere que su chica se la coma fuertote debajo de la mesa, una discusión entre una prostituta y su cliente porque este se dispone a pagar con monedas sueltas, un matrimonio que no está contento con el horrible dibujo de uno de los niños que han apadrinado y pide a una ONG que orienten su carrera hacia otra disciplina artística o un rey mago Gaspar que decide suicidarse tras enterarse de que Melchor tiene cáncer y nunca podrán volver a repartir regalos juntos. No estamos precisamente ante unos actores de método, pero son sus limitaciones las que ayudan a crear personajes claros y repetitivos dotándolos de una vis cómica con la que seguramente soltarás grandes carcajadas ante sus gestos y su tono de voz. Tienen gracia los jodidos. Algunas ideas han dado lugar a pequeñas sagas, entre las que destacan tres falsos videoblogs de autoayuda que parodian este fenómeno tan prolífico (y a veces cargante): el de salud con Ángel, el de protocolo de Rober y el de fitness de Alberto.
No tiene más. No puedo dejar de recomendaros que en cualquier rato muerto entréis en solocomedia.com y disfrutéis de este entretenimiento momentáneo aunque nada vacuo. Al igual que en el caso de Ferrell, podréis encontrar cameos de famosos como Luis Zahera, Marta Torné, Daniel Albaladejo, María Valverde, Juanma Iturriaga, Susana Guasch o Berto Romero. También cuentan con la participación regular de los dos compinches de Alberto en Sé lo que hicisteis, los otros dos paparazi José Lozano y Mario Díaz, además de alguna que otra sorpresa con Castella. Resulta paradójico que mientras en la televisión suelen haber equipos de más de cien personas para dar a luz proyectos de escasa calidad que acaban siendo desechados a las tres semanas de emisión, aquí solo son necesarias cinco personas (ellos tres junto a un cámara/editor y una productora) para sacar un producto fresco, dotado de personalidad diferencial, de buen gusto, barato y capaz de simpatizar con un grupo de público bastante amplio. Y no son solo las ideas, ya que si atiendes a la fotografía y a la limpieza de la imagen en sí verás que está mucho más cuidada de lo que pedimos a un vídeo de coña para internet. Solocomedia va destinado a un target juvenil que jamás ha podido encontrar aquí una propuesta similar en medio de la insigne casposería patria, pero que aún así son consumidores de este tipo de humor debido a que gracias a la red pueden acceder a programas como Saturday Night Live o Portlandia y series como 30 Rock, The It Crowd, The Office o Louie.
Sin más, os dejo con una selección de lo mejor del portal. Os aseguro que os invitará a ver los demás.
Rugby Love
El Bosque
La mesa
Problemas de Narcos
También han cultivado una serie de gags musicales (heredados en parte de la función teatral con Castella) al más puro estilo de Flight of The Conchords o Los Martínez.
Por más que escriba día tras día sigo sin saber muchas cosas sobre este mundo (y parece que cada vez sé menos), pero si algo tengo claro es que el futuro está en internet ¿O es el presente?
Archivo fotográfico ⎪ solocomedia.com, jotdown.es, YouTube.com
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